Se acerca la cena de empresa y, un año más estás pensando en mil y una cosas que tienes que preparar. Por un lado la lista de invitados, por otra el menú, también las copas de después, el vestuario, hasta las conversaciones que vais a tener en la cena de empresa han de estar cuidadas. O eso es lo que piensa tu jefe, y después es el primero en soltar la melena y la lengua… Si tu empresa es de esas en las que ya tenéis superados todos los protocolos, tenéis confianza y supones que pasaréis una cena divertida, no olvides llevar en el bolsillo un buen repertorio de chistes y algún juego, como el juego de «Si fuera»:

juegos-para-cena-de-empresa

Cada uno escribe un personaje conocido en un post-it, en el caso de las cenas de empresa, personas comunes (clientes, proveedores, vecinos de oficina…) El post-it se pega en la frente del compañero de la derecha y cada uno habrá de adivinar de qué personaje se trata haciendo preguntas con respuesta si o no: ¿soy un empleado de la empresa? ¿conozco de hace mucho tiempo al jefe? ¿tengo alguna deuda con la empresa? Así pasaréis una sobremesa muy divertida y sacaréis los colores de manera elegante a más de uno.

Si eres el encargado de organizar la cena de tu empresa este año, ten en cuenta un par de detalles y la rentabilidad será alta.
– Aprovecha para situar a los invitados siguiendo un orden establecido. De este modo conseguirás relaciones entre ellos que hasta ahora no se daban. Estudia previamente las relaciones entre los departamentos y sienta juntos a compañeros que habitualmente tengan trato profesional pero no visual.
– Desarrolla actividades durante la cena que ayuden a eliminar las barreras y verguenzas entre compañeros. Y no nos referimos al alcohol. Aprovecha que hay cenas con espectáculo de humor de risoterapia, juegos y ejercicios de la risa. También puedes idearlos tu, pero ayudate de profesionales para que el resultado sea el deseado.
– Valora la actividad. Para que cada año podáis estar más cerca de conseguir los objetivos perseguidos, después de la cena, envía un cuestionario de valoración a todos los invitados. De este modo podrás saber si la cena ha sido productiva y qué mejoras realizar para que el próximo año la cena de Navidad siga siendo un éxito.
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